
Hace unos días, me di cuenta de cómo a veces la Naturaleza nos muestra paralelismos con nuestra propia vida. Fue así que descubrí a Rockall.
Rockall es un es un pequeño peñón rocoso ubicado en el Océano Atlántico Norte a más de 300 km del territorio más cercano, solo y perdido en medio de ese gran panorama azul. Pertenece al Reino Unido, sin embargo reivindican sus derechos sobre el mismo territorio Islandia, Islas Faroe (Dinamarca) e Irlanda.
Con una base de cerca de 25 m de ancho y una altura de unos 22 m, este pequeño islote suele ser cubierto por las grandes olas provocadas por las tormentas, especialmente en invierno. Es el pico de un volcán extinto.
En 1997 Greenpeace ocupó el islote, le cambiaron su nombre a Waveland y proclamaron su independencia como un nuevo estado. El experimento duró hasta 1999 . Durante ese período llegó a ocuparse la roca durante 42 días seguidos lo que constituye el récord de permanencia en el islote.
Es así como Rockall, sigue sin dueño. Un pedazo de piedra perdida en medio del océano y muy lejos de todos, con el viejo recuerdo de haber sido la punta de un gran e importante volcán. Fue disputado, conquistado temporalmente, transformado, lo abandonaron. A veces, se sumerge y desaparece. Otras emerge y muestra que a pesar de que pocos lo noten, está ahí. Sin embargo hoy continúa como siempre...
Quien en algún momento no se sintió como Rockall??
Rockall es un es un pequeño peñón rocoso ubicado en el Océano Atlántico Norte a más de 300 km del territorio más cercano, solo y perdido en medio de ese gran panorama azul. Pertenece al Reino Unido, sin embargo reivindican sus derechos sobre el mismo territorio Islandia, Islas Faroe (Dinamarca) e Irlanda.
Con una base de cerca de 25 m de ancho y una altura de unos 22 m, este pequeño islote suele ser cubierto por las grandes olas provocadas por las tormentas, especialmente en invierno. Es el pico de un volcán extinto.
En 1997 Greenpeace ocupó el islote, le cambiaron su nombre a Waveland y proclamaron su independencia como un nuevo estado. El experimento duró hasta 1999 . Durante ese período llegó a ocuparse la roca durante 42 días seguidos lo que constituye el récord de permanencia en el islote.
Es así como Rockall, sigue sin dueño. Un pedazo de piedra perdida en medio del océano y muy lejos de todos, con el viejo recuerdo de haber sido la punta de un gran e importante volcán. Fue disputado, conquistado temporalmente, transformado, lo abandonaron. A veces, se sumerge y desaparece. Otras emerge y muestra que a pesar de que pocos lo noten, está ahí. Sin embargo hoy continúa como siempre...
Quien en algún momento no se sintió como Rockall??
3 comentarios:
Imposible no haberse sentido por lo menos UNA vez en la vida como Rockall...
grxs por el comment de mi cumple ... ><... una ternura...
besote
Tal vez todos somos Rockall, aunque durante nuestra vida estemos rodeados.
De seres queridos, odiados y no tanto.
Mirá ese cascote, tan insignificante y tanto lío, ¿no?
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